Descripción
Lo más llamativo al abrir este libro es conocer que el concepto de domesticación, no solo se aplica a los animales, sino también se aplica a las plantas.
Y que solo 12 de todas las plantas comestibles que conocemos, ocupan el 80% de los cultivos.
Se van sucediendo datos y curiosidades que nos van dejando con la boca abierta. Para cuando conseguimos cerrarla, más o menos al final del libro, los autores nos han hablado de la selección natural, de Darwin, del consumo responsable, la huella ecológica, el origen de ciertos alimentos, trucos para optimizar la producción de huerto…Espera, ¿crees que he acabado? ¡que va!; aprendemos también cómo funciona la herencia de los caracteres, si estás pensando en Mendel, ¡bingo!, y aprovechando que Mendel pasaba por allí, nos explican cómo podemos nosotros mismos cruzar distintas variedades una misma planta.
No me quiero extender, porque lo cierto es que la información es mucha, pero no abruma; está planteada de forma muy amena, con datos curiosos y algún que otro chiste.
El álbum acaba con un importante y necesario alegato en favor de la preservación de la biodiversidad, y de la inestimable labor que para ello ejercen los bancos de semillas y germoplasma.
¡¡Así que me parece un libro de diez!!